(Del Libro «Sol y Niebla. Epistolario»)

El Ayuntamiento de Cariñena debería tomar nota del de Zaragoza y aunque ya casi todo está en Leyes, Reglamentos y Ordenanzas. Si carecen de efectividad bueno es corregir o aumentar.

Lo que viene a decir del actual Reglamento sobre el ruido el Ayuntamiento de Zaragoza (se lee en artículo de prensa) es que se prohíbe acelerar bruscamente el coche sin necesidad. Cantar, gritar (debiera tenerse en cuenta hablar fuerte lo que entenderíamos a gritos en la madrugada bajo vivienda de residencia). Prohíbe dejar en marcha los autobuses más de cinco minutos (¡Que ya son segundos!). De cómo mantener un aparato de aire acondicionado…

Y Otros.

Que en realidad están en vigencia pero el propio Consistorio no les ha dado curso en denuncia.

Exime en momento de Festividades el ruido que pueda generar las actividades musicales.

Al parecer no cuentan con la edad de las personas y muy especialmente aquellas que tienen que madrugar para ir al trabajo.

Ciñéndome a Cariñena. El estruendo es tal en las noches musicales que el chún chún se oye en todo punto de la Ciudad. Lo que es extraño que no haya más sordos por contaminación. Luego vendrá la lindeza de basura y abandono de enseres.

Careciendo de autobuses de Ciudad las graves molestias en Cariñena vienen de motores de camión. Aquellos que siguen aposentándose junto a la residencia de mayores y en proximidad de viviendas.

El Ayuntamiento conoce de años el problema. Remediado solo a medias. Quedando quienes le echan un pulso y a las cuatro y media de la mañana pone en marcha el motor no menos de un cuarto de hora.

Los automovilistas. Los hay que campan por sus anchas y a las seis y poco se unen para despertar al vecino que descansa.

La carretera es tomada por pista de entrenamiento.

Dado que de ambos lados cruzan niños y personas (Residencia-Urbanizaciones) sigo a la espera del paso para peatones que hace tiempo debió estar resuelto.

De haber reparto de estrellas para premiar la ciudad sin ruido Cariñena se quedaría con la pisada y olvidá; hoja de parra.

Carmen Amigó y Pérez-Mongay

Posdata/ Visto lo visto…
Para Ayuntamientos… Los españoles.

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