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agosto 2014

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CONDESA DE BURETA.

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Calle-Condesa-de-Bureta

(Del Libro “Pájaros y Plumas. Soliloquios en tempero”)

Tan ilustre persona la Condesa de Bureta tiene dado su nombre a una calle que desemboca en el Mercado Central de la Ciudad de Zaragoza.

Calle que si mal no trae el recuerdo en su comienzo tenía su sede la ONCE.

Ahora los pisos de aparente lujo (aunque para ir a vivir allí hace falta tener ganas por la soledad de la arteria) impactan a quien hace años no transita por el rincón.

¡Ah…! El rincón. Que es todo darse la vuelta y… Véase la basura a montón por arte de algún sucio personaje.

Al problema de la suciedad estacionada y aquella que corría a la vuelta calle abajo se suma el que junto a la ropa en descansillo está lo que parece una ensaladera de cristal rota. Lo grave (por tratarse de un lugar solitario) es que se le pueda a alguien cruzar el cable y cometer alguna fechoría.

Notificado al Ayuntamiento de Zaragoza. La dama al teléfono muy atenta dice ser la encargada de pasar la sugerencia al servicio de limpieza.

Zaragoza no merece gente con tan poco miramiento que se deshace de la posible basura donde se le antoja.

En baldosa de esquina calle “Condesa de Bureta”.

La Condesa de Bureta fue hija de Manuel de Azlor y Urriés y de Petronila Villavicencio y Villavicencio aunque nacida en Gerona el 12 mayo 1775 de muy joven pasó a residir en al palacio Virreinal de Zaragoza por ejercer su padre el cargo de Virrey de Navarra. María de la Consolación de Azlor y Villavicencio era nieta de los Duques de Villahermosa. La Casa Palacio de estos Duques se encuentra en la población de Pedrola (Zaragoza).

Casada con Juan Crisóstomo López Fernández de Heredia VI Conde y Señor de Bureta, Señor de Salillas, Xésera, Millá, Buriaman, Almalec, Ferreruela y Araso y de la jurisdicción criminal: De los lugares de Frago, Salavert y Canella. Tuvieron su vivienda en la calle Nueva del Mercado. La Heroína de Los Sitios la puso a disposición de los heridos y enfermos. Esta emblemática casa pasaría a ser el antiguo “SEPU”. Para quienes son nacidos en Zaragoza en vísperas de Reyes era Almacén obligado en la compra de juguetes. Hoy aquellos locales han pasado a ser Supermercado.

Quizás por proximidad (de costado y por detrás del edificio de su domicilio) el Ayuntamiento de Zaragoza en su momento le dedicó esa calle a la Condesa Heroína.

Aunque ciertamente el emplazamiento de su vivienda conocido (hoy Torre Nueva o Torrenueva de corrido) debieron por justicia dedicarle este vial.

La calle hace referencia a la Torre que se encontraba en la Plaza de San Felipe y como no podía ser de otra manera: La derribaron.

En tiempos atrás no era de recomendación transitar la sinuosa “calleja” conocida por Condesa de Bureta. ¡Ahora me lo pregunto! Aunque difiera el motivo.

Solo el equivoco te lleva ¡lo que no está mal! a encontrarte con ella pues descubres lo no esperado.

Las damas que la concurrían daban que decir al proporcionar sus encantos. Con los que el sexo masculino se sentía encantado.

“Prohibido el paso por allí; de no ir acompañadas… las jóvenes”.

No se trataba de un cartel era la advertencia de los mayores.

La basura será retirada y ahora es suposición que el servicio de recogida estará al tanto. La Calle que le dedicaron a la Condesa de Bureta continuará; como las dedicadas a los Defensores de Zaragoza en 1808 que no se precian de ser calles transitadas y mucho menos conocida su importancia histórica: Olvidada.

¡Dejadez…dejadez!

Solo gustan los comensales de escaparate y parafernalia.

Carmen Amigó y Pérez-Mongay

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