Lo único que le faltaba al conflicto independista catalán, era la “mediación” de la “Santísima” Iglesia Católica.

¡Apaga y vámonos!

Es como nombrar jefe de los bomberos, a un pirómano.

¿Es que no hemos visto ya la impostura de la Iglesia, favoreciendo el independentismo ilegal y permitiendo incluso votar en las Iglesias, con las esteladas colgando de los campanarios?

¿Es que no hemos visto, comprobado y padecido, cómo a lo largo de su inquisitorial historia, lo ha traicionado todo y a todos, empezando por el Dios que dicen representar y al que crucificaron y crucifican continuamente con todos sus actos?

Hombre, por favor.

¿Es que no vamos a aprender nunca?

¡Muy fuerte!

Sin duda, cada pueblo tiene lo que se merece.

Rafael Bueno.

Córdoba.

La academia de la lengua, nos dice que la expresión ”perder el oremus” se utiliza “coloquialmente” o viene significar “perder el juicio o la cordura” o que algo definitivamente se te va de las manos, aunque pienses que te “asistan” todos los derechos del mundo y que quizas hallas emprendido un camino de difícil solución. Los acontecimientos que vive de un tiempo a esta parte el pueblo y la sociedad Catalana, es de esas situaciones en las que se que ha perdido ese “oremus” Y no ya porque una importantísima parte de sociedad y ese pueblo , tenga todo el derecho a expresar , cual quiere que sea su futuro dentro del estado español( algo que gobiernos  españoles han estado ignorando durante años) hasta que les ha “explotado” en su cara, convirtiéndolo  un problema  político de “calado” que tiene ya resonancia internacional, pero sin “olvidar” quizas  tambien  a esa otra “parte” de dicho pueblo que a lo mejor no estaba de acuerdo con el fondo y las formas, que sus representantes en el Parlament  de Cataluña dieron  el “pistoletazo”  de salida, a la ya mas que probable declaración unilateral de independencia ( en un gesto, calculado o no) Parece que ya le dialogo se antoja “imposible” entre la “cerrazón” del gobierno español  cuyas “respuestas” son solo policiales y judiciales( creando si cabe mas partidarios de la secesión) y las de un “govern” que no quiere “decepcionar” y que seguro se la “juega” ante sus votantes y partidarios, y si cabia  perder mas ese “oremus” tenemos al jefe del estado español , que en vez de ejercer de “moderador” a  atizado mas si cabe los animos. Dialogo por favor… no perdamos para siempre el “oremus”.

Mis hijos han tenido la suerte de acudir a colegios “abiertos”, “libres”, “limpios de ideologías partidistas”… Han tenido la suerte de estudiar la historia real, de poder CONFRONTAR el contenido de sus libros y de conocer España sin orejeras.

¡Señora Ada Colau! ¡Señores políticos que la mantienen en su cargo! Sólo se pido honradez personal e institucional.

800 o 900 heridos según manifiesta la señora Colau. ¿Cuántos partes médicos ha podido comprobar? ¿Cuántas manifestaciones de lesiones, con pruebas fehacientes, han sido presentadas en el Ayuntamiento?

Usted pregona la dureza de las Fuerzas del Orden Público poniendo delante 800 o 900 lesionados. Por respeto al derecho que todos tenemos a conocer la verdad, PRESENTE LA DOCUMENTACIÓN PROBATORIA de aquello que manifiesta.

Usted, señor Ada Colau, se olvida, al igual que aquellos partidos que la apoyan, que es la administradora de TODA Barcelona y de TODOS sus habitantes. Todos tienen derecho a conocer las pruebas de los 800 o 900 lesionados.

¿Puede usted y los suyos presentarlas?

La historia no se escribe así. De este modo se emborrona y lo único que quedará como recuerdo será una oscura imagen de los malos e interesados comunicadores.

Gracias por leer esta misiva y muchas gracias si presenta lo solicitado.

Ese era el objetivo y por eso se ha llegado hasta aquí con Cataluña y lo que nos queda por ver.

En Argentina, cuando ya el poder había saqueado el País total y absolutamente, para taparlo todo, invadieron Las Malvinas y metieron al pueblo en una guerra con el Reino Unido.

Así actúa el poder siempre, para tapar sus propias fechorías.

Al poder no le importa, después de haber arruinado al pueblo, encima, mandarlos matar en una guerra, de la que ellos siempre, por supuesto, se mantienen al margen.

Recordemos que en nuestra guerra incivil, los autores protagonistas del desastre, se fueron de España y vivieron como Dioses en diferentes países, mientras que aquí  mataban a los pobres inocentes, por todas las cunetas de la España rota, que se mantiene hasta nuestros días.

La historia se repite siempre, cíclicamente.

Rafael Bueno.

Córdoba.