En el año 1988, en la parlamento vasco creo y aprobó , la ley por la cual se creaba e el instituto vasco de la mujer (Emakunde) un “hito” pionero sin duda, en todo lo referente a los derechos en igualdad entre hombres y mujeres y que posteriormente, se completaría con sucesivas leyes, como la ley de igualdad del 2005. Han pasado ya mas de 30 años, desde la creación de dicho instituto y adscrito desde sus inicios, a la presidencia del Gobierno Vasco ( Lehendakaritza) dándole sin duda el rango e importancia que merecía. A lo largo de estos años transcurridos, las mujeres que han dirigido o bien han ocupado cargos de responsabilidad en dicho instituto, han desarrollado ( no me cabe duda) una tarea ardua e ingente, en pro de los derechos , injusticias sociales u otras de diverso índole, con las que seguro les toco “remar”. Con la nueva configuración de los organigramas, del recién constituido con Gobierno Vasco. Emakunde “ha perdido” por llamarlo de alguna manera, su adscripción que le unía con la Lehendakaritza  y sin bien es cierto que tenemos una Consejera de igualdad  y políticas sociales, a cuyo departamento parece ser, quedara integrada Emakunde , han sido muchas las voces que entre perplejas y sorprendidas, no han visto quizás muy adecuado dicho cambio, entre ellas muchas de las ex directoras o cargos mas arriba citados, o bien diferentes colectivos feministas y un buen puñado de técnicas en igualdad. Vivimos tiempos difíciles y cambiantes, que todo@s conocemos  y habrá que conocer y ver, los planes e intenciones de la Consejera de igualdad y que no me cabe duda que serán los mejores, pero me uniré a las “voces” que pide reconsiderar dichos cambios. Por cierto, medio en “broma” medio en “serio” leía no hace mucho una crónica periodística, en la que se decía: que de nuevo, que las ex directoras de Emankunde, estaban “buscando” al  Lehendakari.

Si los españoles hicieran memoria de los siete pecados capitales, buscarían un método intuitivo para recordar cómo recolocar la “soberbia”, la “envidia”, la “avaricia”, la “pereza”.

Estos son la base deslizante de la decadencia personal y sindicada.

El PODER JUDICIAL ORGANIZADO POLÍTICAMENTE abre la puerta a la “dejadez por impotencia…, a la soberbia elitista…, a la envidia al escogido…, a la avaricia de poder …

La BALANZA agujereada por el pragmatismo, ya no es “FIEL” sino “PRUDENTE y JUSTA, aunque INTERESADA y AJUSTADA al criterio del poder”.

“C’EST LA VI”

En la vida “REAL” la gran ventaja del “área especializada” es que los casos son tan repetitivos, que las sentencias podrían redactarse con un “corto y pego”.

La personalización de lo “JUSTO” es muy difícil cuando todo se convierte en un “ORGANIGRAMA”

Mejor que hacer leyes de MEMORIA HISTÓRICA MEJORADA, sería encuadernar la historia como enciclopedia obligada, para recordar y no olvidar que el único animal que tropieza dos veces sobre la misma piedra es el hombre, porque “la soberbia le ciega”.

De qué sirve releer la historia para no olvidar 40 años de dictadura si borramos por cobardía la de los años 30, propiedad también de todos los españoles.

Es un orgullo seleccionar, de joven, la CARRERA DE PERIODISMO, esencia de la ética informativa y base de independencia y libertad personal y gremial.

Ahora, sin embargo, el virus de “las subvenciones programadas”, está arrasando con los principales capítulos conceptuales del verdadero periodismo.

Los espejos personalizados convierten la realidad en imágenes figurantes que entretienen, pero no describen la verdad.

Quizás terminen siendo personas más prósperas, pero incapaces de guardar limpio el carnet de LIBERTAD PERIODÍSTICA, sueño y promesa de juventud.

No olvide LA PRENSA SUBVENCIONADA que los españoles, aún sin carrera, son capaces de DILUCIDAR y ELEGIR.

No olvide LA PRENSA SUBVENCIONADA que la mentira pagada es la semilla de todos los enfrentamientos civiles.

Como en aquellos cuadros sinópticos de nuestros colegios, tengamos claro que la LIBERTAD, la VERDAD y la CONVIVENCIA tienen su balanza en una JUSTICIA INDEPENDIENTE, en una HISTORIA REAL PARA TODOS y en una GRAN PRENSA LIBRE,

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Van a quitarle el nombre de San Rafael, a la plaza de Fuengirola donde está ubicada la estatua del Arcángel, con el rostro de Sandokán.

Duro palo a la Córdoba profunda.

La foto de la inauguración de dicha estatua dio la vuelta al mundo y Córdoba quedó una vez más, como tuvo que quedar.

En dicha imagen aparecía el Cura-banquero Castillejo bendiciendo la estatua, acompañado por el propio Sandokán y la Alcaldesa comunista, Rosa Aguilar.

¡Ahí quedó eso!

Vamos, ni la cartelera de la película El Padrino III, le gana.

El otro Arcángel San Rafael que también dio la nota, fue el nombrado colegiado de honor del colegio médico cordobés.

Y de la falsa Misa del falso aero club, mejor no hablar.

¡¡¡CÓRDOBA, O MUERTE!!!

Rafael Bueno.

Los españoles no debemos ignorar lo que fue una guerra civil SUCIA, como todas.

Los españoles, también, sin duda, debemos estudiar las realidades de la política, de los políticos y del pueblo en los años 1930-1936.

Los españoles tenemos que condenar, siempre, lo INJUSTIFICABLE, pero, a la vez, no negar TODA LA REALIDAD HISTÓRICA.

Hoy, siglo XXI, la corrupción personal, la política y la institucional son campos de minas de los que nadie nos vamos a librar.

Debemos aprender a sortear la MANIPULACION de la HISTORIA. Debemos aprender a vivir sin el sometimiento a la mentira que da de comer. Debemos aprender a no ser meros «artistas de relleno», por activa o pasiva, en la realidad social que nos ha tocado vivir.

El dogmatismo, en ciertas épocas de la historia, supuso cierto progreso; hoy, los dogmatismos son utilizados para, con pan y bebida, ENGAÑAR al pueblo, FALSIFICAR nuestra propia historia y desarrollar INSULAS DE PODER, podridas de corrupción.

El PP se equivoca cuando no sabe ESCRIBIR, PUBLICAR y ENSEÑAR todas las REALIDADES, buenas y menos buenas de nuestra sociedad.

Permitir, en silencio cobarde o interesado, que una bancada y otra bancada y la de arriba y la de abajo… UTILICEN y RETUERZAN la HISTORIA DE TODOS para su mayor beneficio es CONVIVIR con el enemigo… eso tiene un nombre: TRAICION A SUS VOTANTES y, sobre todo, a sus principios.

Contemplar y oír cómo un Presidente de Gobierno, Pedro Sánchez y toda su “centuria acomodada”, olvidan los tiros a la nuca, lloriqueando el suicidio voluntario de uno de los asesinos y NO HACER NADA ¿qué es, señores de medio centro, media derecha y medianía?

Oír, con “silencio reverencial”, que “ustedes los del Partido Popular no respetan la Constitución” y NO HACER NADA… y NO LEVANTARSE Y ABANDONAR EL CONGRESO… Y, ADEMÁS, CALLARSE… ¿qué quieren que piensen sus votantes?

Decretos y Leyes que llevarán a España a ser ROJA y AZUL y NO HACER NADA…

Consentir los permanente amaños de miles y miles de subvenciones “ideológicas” y NO HACER NADA…

Contemplar las colas para comer, las listas de espera sin fecha, los cientos y cientos de ERTES sin pagar, los abusos en subvenciones que dicen “humanitarias”, la acomodada forma de vivir en que se ha convertido la política, los gastos millonarios en consejeros y acompañantes, tíos, sobrinos y primos lejanos, el desprecio “real” del autónomo, motor silencioso del País, la Caja Única vacía por culpa del despilfarro… y NO HACER NADA… ¿No debería hacer pensar a tanto y tanto figurín de miles de euros de costé?

Creo, sinceramente, que estamos VENDIENDO ESPAÑA y su HISTORIA A PRECIO DE SALDO.

Creo, sinceramente, que el SILENCIO DE LOS MUERTOS VIVIENTES envuelve nuestro paisaje.

Creo, sinceramente, que lo de “las dos mejillas evangélicas” están entendiéndolo mal los señores del Partido Popular. El evangelio dice que “TÚ PONGAS” … no que “PONGÁIS LAS DE LOS DEMÁS”.

Aunque muchos no lo comprendan.

Ahora, en el silencio de la noche, me gustaría recordar a aquel muy joven monje trapense, Hermano Rafael, San Rafael Arnaiz.

Su vida transcurrió en años muy dolorosos para todos los españoles.

“¡Hermano Rafael!, recuerdo de todos tus amigos.

Lo estamos pasando muy mal, sobre todo moralmente. La esperanza sostenida por nuestra FE se derrumba”

“¡Échanos una mano!”.

“¡Enséñanos a borrar todo lo que nos hace daño y comprender la debilidad humana!”.

Un abrazo

ENMUDECER a Dios (sentido común por excelencia), es el primer propósito del socialismo totalitario.

Volver a CRUCIFICARLE (espectáculo único en la historia del hombre), es el teatro fin semana que el comunismo elitista, ofrece al obrero como escarnio y sorna burlesca.

La VIDA (misterio y camino de fe), tiene sentido si las IDEAS personales son respetadas.

Sólo la REVOLUCION DE LA INDIVIDUALIDAD rescatará el futuro de un mundo anestesiado y utilizado, interesadamente, por el facticismo ideológico del poder.

La LUCHA OBRERA, no la sindical, para sobrevivir, debe respetar los límites del derecho básico, el del individuo como unidad personal.

El SINDICALISMO DE SIGLAS POLÍTICAS, obediente primero al partido al partido y manipulador del obrero, debe ser señalado como traidor cobarde de su propia naturaleza.

Escandalizarse «farisaicamente» al inicio del curso escolar y olvidarse de la historia del COVID-19 para no dañar al gobierno, es volver a traicionar la «posible» honradez, que todavía quede en el sindicalismo y volver REUTILIZAR LOS PROBLEMAS a beneficio del partido que les ayuda.

Ante toda esta farsa, MARCELINO CAMACHO y de NICOLAS REDONDO, como Moisés, romperían las TABLAS DE LA LEY, hoy llamadas ESTATUTOS SINDICALES.

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La política ha comenzado a asfixiar la vida ciudadana, no por la esencia de aquella, sino porque el mundo de los parásitos politiqueros está invadiendo la sociedad.

La “POLIS” cada vez se parece más a un campo de minas, en el cual te salvas, solamente, si tu partido te da el plano.

Los “sin partido”, para sobrevivir, deberán llevar consigo el detector de ideología «patriótica», que les será entregado con la condición de «enmudecer su libertad».

Querer participar, querer colaborar, si no tienes carnet ideológico, es jugarte tu intimidad, tu proyección profesional y, sobre todo, tu anonimato.

Lo más grave es que este diseño institucional, «made in Spain», lo primero que hace es «adormecer la conciencia».

La soledad del corredor de fondo rotulara el camino de las libertades individuales.

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Tengo un crédito Hipotecario con BCI que he cancelado sagradamente, sin mora ni alteración alguna, desde hace 18 años. Este crédito hipotecario incluye desde siempre un “Seguro de Cesantía” (Póliza KP 506833-9, ítem N°1, por 0.5267 UF mensuales. También soy cliente BCI desde antes de esa fecha.

El 15 de enero de 2020 quedé cesante; tenía seguro de cesantía (AFC), por lo que seguí pagando con ese ingreso el dividendo y -por supuesto- el mencionado seguro de cesantía (el del Hipotecario), hasta hoy.

Cuando se acercaba el término de mi seguro AFC, realicé los trámites (denuncio) para activar el seguro BCI, ya que en ese momento empecé a necesitarlo realmente, el 5 de agosto de 2020.

Casi un mes después, la Srta. Soledad Ocampo, liquidadora de BCI Seguros, me informa el rechazo de mi siniestro por “denuncio fuera de plazo”. Supuestamente, en la letra chica del seguro que contraté hace 18 años se establecía un plazo de 180 días para el denuncio, es decir, lo hice con 20 días de retraso, por presentarlo después de mi seguro de cesantía.

Sin perjuicio de la legalidad o no de este rechazo (¿al recibir seguro de cesantía AFC estoy en la práctica cesante? ¿Por transcurrir 180 días cesante dejé de estarlo?) creo que el tema acá es de flexibilidad, comprensión y respeto. Si no fuera así, mejor que sea una máquina la que liquida los seguros. Cero humanidad en pandemia, cero escuchar razones.

A todos los cesantes con crédito hipotecario les invito a revisar sus condiciones en detalle, para que no vayan a caer en la “trampa perfecta” que me fue tendida y a la que ingenuamente y por ser demasiado ingenuo, caí. BCI ¿Somos Diferentes?…

                                     Hugo Jara Contreras

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“El conocimiento no es una vasija que se llena, si no un fuego que se enciende” hace ya unos cuantos siglos, que el celebre historiador y ensayista griego Plutarco, plasmó en algunos de sus escritos la frase antes referida y que aludía sin duda, a la idea o ejemplo que tenia el escritor de lo que significaba para el la palabra Ciencia: Esto es, descubrir y entender el mundo y nunca dejar de ser “curiosos” y sobre todo, preguntarse el porque de las cosas. No es casual que los científicos y científicas, son un poco como los niños pequeños, tratando de descubrir y sobre todo entender, los intrigantes misterios del mundo que nos rodea. No será por falta de recordarnos a todos como sociedad, los “llamamientos” de la comunidad científica del estado español, de las graves carencias y limitaciones que tienen, a la hora de desarrollar sus trabajos e investigaciones, siempre con un “ojo” puesto, en aquella u otra beca o subvención , con la que completar el trabajo emprendido. Nos parecía quizás , que con la llegada del nuevo gobierno y su flamante Ministerio de Ciencia, las cosas igual cambiarían, pero hete aquí que seguimos con unos presupuestos prorrogados y por lo tanto a la espera, que dicho Ministerio tenga capacidad y altura de “miras” para satisfacer con holgura suficiente, todas aquellas necesidades y aspiraciones, de la comunidad científica. No es de recibo, que cuando padecemos situaciones o momentos difíciles, como los actuales, todas la cabezas giren hacia los científi@s y el resto no me acuerdo, Así pues, si queremos que sigan descubriendo y entendiendo el mundo, démosles la importancia que se merecen.

En el diario: “… para poder poner en práctica lo planificado…”.

En la televisión: “… para poder entender las consecuencias de esta decisión…”

En la radio: “… y así poder compartir con ustedes este momento…”.

Yo: “… te llamo, a ver si podemos juntarnos…”.

¿Por qué no decimos “para poner en práctica lo planificado”, en vez de “para poder poner en práctica lo planificado?” Por qué los empeños del caso no se ejercen “para entender las consecuencias de esta decisión?” en vez de “para poder entender esas consecuencias. Y así.

Esa obviedad -que antes de hacer algo hay que poder hacerlo-: ¿es reflejo de una humildad defensiva? ¿hay algo idiosincrático en ese alejamiento de la acción cuyo reconocimiento nos haría más inteligentes? ¿habrá sido que el uso de esas maneras de decir fue cargando nuestras acciones con el peso de la incertidumbre? ¿reflejarán esas palabras una voluntad precavida que anticipa el fracaso de la acción? ¿o que nos libera en alguna medida de responsabilidades? ¿será que las palabras y nuestra creación son siamesas?

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