Si para CONFINAR mediante un DECRETO DE ALARMA, urgente, preparado con antelación, se han utilizado argumentos y datos fuera de contexto, alguien debería, no sólo hablar, sino ACTUAR.

No esperaran que lo haga el españolito de a pie, el que cobra un salario normalito y, además, no tiene medios para hacerlo.

Entiendo que son los PARTIDOS, perjudicados o no, por honradez, los que deben llamar la atención al Gobierno o al Ministerio correspondiente.

Entiendo más, deberían ser los DIPUTADOS o SENADORES, ALCALDES o CONCEJALES, porque son representantes de los confiados votantes, con voz cada cuatro años.

Cuando eso no se da se está incumpliendo lo más esencial QUE LLEVA IMPLÍCITO UN VOTO: La CONFIANZA

Al pueblo no le queda otra que comentar en todos los corrillos:

¡VA!, SI TODOS SON IGUALES …  Eso SÍ, cobran todos los meses …

A buen entendedor pocas palabras bastan.

Señor ministro de Sanidad:

La Ética personal, por lo menos, le exige a usted CONOCER LOS MOVIMIENTOS DE AQUELLAS PERSONAS CALIFICADAS como IMPORTANTES y, por tanto, con la obligación de ser EJEMPLARIZANTES.

El listado es muy simple:

1. Día 9, finaliza el Consejo de Ministros, se ha declarado la CONFINACIÓN de Madrid…

¡RASTREADORES! ¿Qué ha pasado con los ministros, con los diputados, con los concejales, con los altos Cargos…? ¿Se quedaron dando ejemplo o salieron corriendo gracias a la información privilegiada que podían tener de horarios, de carreteras…?

¡RASTREADORES!  A recorrer municipios (de incognito), con testigos independientes… A visitar ambulatorios y hospitales, comprobar las AGLOMERACIONES, las COLAS INTERMINABLES, la ANGUSTIA de las personas…

Seguro, señor ministro, veríamos dos cosas:

1. La «llamada ética política», escapando de la Comunidad de Madrid, como ejemplo político demoledor… Ellos, SÍ pueden ir al médico en días festivos (ministra de Educación); ellos, SÍ pueden ir a analizar en la serenidad de la campiña los problemas de Madrid; ellos, SÍ pueden justificar que España depende de su actividad…

¿Cómo se llama eso… algo de “duro”, de “cara”?

2. Las mentiras sobre las COLAS, sobre las AGLOMERACIONES, sobre las URGENCIAS… NO ES EL Estado de Alarma

¡AUXILIO! Estamos INFESTADOS… Invadidos por un virus muy peligrosos y como consecuencia la mayoría pobre está INFECTADA…

Puede que se levanten actas que contemplen la TRANQUILIDAD de los AMBULATORIOS, de las URGENCIAS, de los HOSPITALES…

Para terminar, decir que el remedio para esta pandemia no es el Estado de Alarma, sino el tratamiento de guerra, con leyes URGENTES para JUICIOS SUMARÍSIMOS, con PENAS DE ESCARMIENTO.

Decide la GUARDIA CIVIL, LA POLICIA NACIONAL…

Ahí lo dejo… No va a servir de nada, pero…

10-11-2020

Ángel Alonso Pachón – El Zorba – XXXXXXX – Cl. XXXXXXX (28903 GETAFE-Madrid)

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No es difícil comprender que en un país de ciegos el tuerto es el rey. No es difícil entender que donde no sé regala el bienestar, todos trabajan. No es difícil tener derechos cuando se respetan los de los demás.

Eso es lógica natural.

Esperar, sin embargo, que, en el siglo XXI, el maná venga con el viento del norte, es como esperar que los siete enanitos, cantando, nos den de comer.

Pensar, como ilusos, que con ilustres copiones… con señores de curriculum falsos… con “liberados” sin oficio… con catedráticos a sueldo… con ministrables arrodillados… con prensa teledirigida… con un equipo de “descolados moralmente” vamos a convencer a nuestros socios, gestores del frío, para que acudan a socorrernos… ES DE ILUSOS.

Vamos de “sobraos” y, como es normal, nos la dan por todas partes.

Lo más grave, además, es que vamos MINTIENDO, ENGAÑANDO y CON CARETAS… Damos la mano con guante para que no se note quiénes somos y cómo somos …

Ese “NORTE” cabroncete, es trabajador, cumplidor, pagador, cuadriculado… por eso le salen las cuentas.

Nosotros, españolitos, ya ni siquiera somos aquellos “pícaros” de siglos pasados, ahora somos tan cobardes, que recibiendo migajas nos consideramos “bien pagaos”.

Con todo lo dicho, no queda otra cosa que saludar con respeto al “NORTE” y volver a la escuela para aprender los “CUATRO PUNTOS CARDINALES” y si no los encontramos es que “HEMOS PERDIDO EL NORTE”.

Me estoy arrepintiendo de haber sido honrado. Me estoy arrepintiendo de haber pedido siempre disculpas. Me estoy arrepintiendo de creer en los sermones mitineros. Me estoy arrepintiendo de esperar la llegada del maná. Me estoy arrepintiendo de ser como aquellas personas “buenas” quisieron y me esculpieron.

Antes no soñaba, porque todos los días creía palpar una parte del paraíso… era joven.

Antes no esperaba, porque creía recibir de corazón lo que en realidad me daban como precio de compra.

Antes no me arrepentía, porque me educaron para pensar que yo era el “bueno”.

Ahora sueño, me arrepiento y espero… porque la “mentira” ha envuelto todo y en la cima del monte de las tentaciones he visto al diablo, al todopoderoso usurpador, al falsificador “summa cum laude” y tras él a los falsos discípulos hambrientos de poder.

Ya no me centro, porque, queriendo ver y palpar aquello en lo que me educaron, sólo veo muchos trabajadores a sueldo del Estado, antes con sotana, ahora sin ella.

Ya no me centro, porque el entrenador me coloca fuera de lugar, a empujones, impidiendo que diariamente me acerque, cerrando para eso las iglesias, las capillas y hasta el confesonarios.

Ya no me centro, porque no sé si “La verdad me hará libre” o “ciertas verdades me facilitarán la vida” … Si así fuera, entonces todos me habrían engañado.

El tiempo dirá lo que sea. Lo dirá sin aspavientos. Lo dirá en silencio y a cada cual.

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Hace ya muchos años, Feliciano, cura de sastrería conventual, se dedicó a llevar a cabo una labor «señalada» como proselitismo invasivo, por los que, hoy, como fariseos modernos, lavan diariamente la cabecita de jóvenes con ideologías, que al contrario de las de Feliciano, duran justo el tiempo que les dan para comer y enriquecerse.

A Feliciano el tiempo le hizo un monumento, con la ilusión y con las aportaciones de cientos de beneficiados de todos los colores. Padres y «Madres», agradecidos también, por el “gran regalo” hecho a sus hijos de una formación seria, encuadrada, y a la vez ABIERTA y sobre todo REFLEXIVA.

A Feliciano, si hoy le viéramos, ya no le reconoceríamos, pero todos… todos, le llevaremos en el corazón, aunque el tiempo nos haya endurecido.

Entre esos cientos de «elegidos», hoy, hay agnósticos, indiferentes, respetuosos, piadosos y fervientes creyentes, pero TODOS llevan el estigma de una semilla no perecedera, que día a día da el fruto que Feliciano impregnó:

“LA VERDAD, VUESTRA VERDAD, OS HARÁ LIBRES”

¡Feliciano, sacerdote marianista, GRACIAS!

El pueblo, el que todos los días madruga para traspasar la ciudad amontonado, no puede IMPONERSE; no puede decir basta porque sus propios gobernantes han colocado INHIBIDORES a su alrededor.

LEVANTARSE SOCIALMENTE, hoy por hoy, dicen que lo hacen los que arrasan las calles, queman el mobiliario urbano, asaltan los nudos de comunicación, aeropuertos, autopistas y trenes. Eso no es PONERSE FIRME ANTE UN GOBIERNO INCUMPLIDOR, eso, simplemente, es barbaries populistas guiados, financiados, mercenarios de oficio.

Aquí hablamos de HACERSE OIR desde los puestos ejecutivos. Aquí decimos que el funcionariado, los jueces, los fiscales y los sindicalistas de corazón, no de oficio, son los que pueden y deben LEVANTAR LA VOZ y PLANTARSE ante los DERROTEROS PSEUDO COMUNISTAS, POPULISTAS, DEMAGOGOS Y ANTISISTEMA.

Estos EJECUTIVOS DE LA SOCIEDAD, entonces, tendrán a su lado al pueblo sencillo, deseoso, simplemente de PAZ, TRABAJO y FUTURO PARA SUS HIJOS.

Si todos ellos callan… la HISTORIA, primero, les señalará y después borrará sus nombres; el PUEBLO, contemplará cómo la pobreza vuelve y entonces, SÍ, que se levantará y proclamará la DESOBEDIENCIA CIVIL, único recurso de los pobres organizados.

No hablo de los PARLAMENTARIOS de conciencia plana, planchada según el partido que les agrupa. Estos PARLAMENTARIOS mejor sería que fueran unos días al desierto a reflexionar y VOLVER SABIENDO CÓMO SE DEBE RESPONDER A LAS TENTACIONES.

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Siempre que se sale a la calle, ocupándola con banderas exclusivas, la libertad suele ser derrotada.

La calle, la prensa, los boletines oficiales deben destacar por un equilibrio respetuoso con el “pensamiento transversal”, no con “estructuras abanderadas”.

Enjuiciar no es simplemente condenar, sino intentar conocer y comprender a una persona “señalada”, para después aplicar, con una justicia firme y moderada, la reparación más adecuada.

Entrar en un Ministerio como un elefante en una chatarrería, es lo más parecido a querer “enjuiciar y quemar” la realidad sin ni siquiera preocuparse en “conocerla”.

Eso es lo que, a mi entender, como persona integrada en el mundo de la formación, está llevando a cabo la señora Ministra de Educación, Isabel Celaá.

Hace años, sin tantos medios para conocer y controlar el funcionamiento de cualquier institución o empresa, se podría comprender que se pudiera dar “golpes innecesarios sobre la mesa” (a eso se llama dictadura). Hoy, siglo de la informática, siglo de la información, siglo capaz de guardar en la memoria lo inimaginable… HOY, es incomprensible condenar a golpe de poder “elefantino”.

Nadie puede decir con honradez que el sistema educativo es perfecto, pero tampoco NADIE PUEDE CULPAR DE ELLO A LA ENSEÑANZA PRIVADA o CONCERTADA.

Desde este mirador de barrio y con la vista de la historia de toda una época, no comprendo como otras personas, muchísimo más cualificadas que yo, no levantan la voz, no se esfuerzan en poner sobre la mesa pruebas y pruebas, recomendaciones y recomendaciones, mediante todos los medios que hoy se tienen, para demostrar la manipulación que se está haciendo desde el Ministerio, socavando los derechos individuales y los principios constitucionales sobre la libertad de enseñanza.

Si hacemos un recorrido por los diversos centros de formación, públicos, privados o concertados podremos ver que la CUALIFICACIÓN sólo lleva un adjetivo PROFESIONAL.

Ilustres profesores han trabajado en todo tipo de Centros. Ilustres alumnos, académicos, científicos e investigadores han copado la historia de todos ellos.

Existen ejemplos extraordinarios de CENTROS, basta mirar los de ranking sobre Colegios de toda España.

INTERVENIR, ¿para?… AXFISIAR, ¿con qué fin?… UNIFICAR y PLANIFICAR, ¿y la libertad?… DICTAR, ¿es crear?… APROPIARSE, ¿no es hurtar?…

Señora ministra, España no necesita multiplicar los problemas. Ni se puede permitir que vengan políticos con polvorines en el bolsillo: Franco, El Valle de los Caídos, el control de la enseñanza, la memoria democrática de la señora Carmen Calvo, el entierro y desentierro de los caídos hace más de 80 años, según el color de cada cual, la Iglesia y su Concordato, la Monarquía Parlamentaria y sobre todo la pandemia de amigos a quien colocar… ¿Quiere usted más problemas?

Está claro que nos vamos a entender:

LOS ESPAÑOLES QUEREMOS TRABAJO… TRABAJO… TRABAJO… y… FUTURO… FUTURO… FUTURO…

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Todas las ciudades, pueblos, barrios… Todos los centros educativos, universidades, institutos, colegios… Todos los ambientes culturales, de ocio, de convivencia… TODOS CORREN EL RIESGO de ser infectados por el dichoso COVID’19.

Cuando digo TODOS, me estoy refiriendo a TODO EL MUNDO CIVILIZADO… Un COVID’19 sin fronteras no distingue ni países, ni culturas, ni colores, ni ricos, ni pobres…

La PANDEMIA ha declarado una gran GUERRA MUNDIAL contra algo que la ciencia, sola, no puedo vencer.

Las guerras se pierden, esencialmente, por tres motivos, la falta de medios militares, la falta de voluntad ganadora y la ausencia de auténticos mandos operativos.

En España, ya casi deshilachada por la indiferencia responsable de sus políticos, nos han fallado las tres cosas:

El VIRUS nos pilló sin suficientes instrumentos sanitarios, sin auténtica voluntad de solucionar el problema (no se eligieron los mejores profesionales sino los más obedientes a los políticos) y sin normas y leyes de GUERRA.

Todo el mundo conoce lo que en tiempos de conflictos bélicos se denomina “juicios sumarísimos”.

El espionaje interno, el robo de material militar, el abandono de los puestos de guardia, el hurto de víveres de campaña, etc., eran sometidos a la pena máxima de forma inmediata, con el mero trámite de la identificación.

Aquí, ahora, con más de 50.000 muertos, ante una guerra tan sutil y desconocida, las reglas más esenciales que salvaguardan la firmeza de sus fuerzas son inexistentes…

Si el incumplimiento de las normas, impuestas como medidas para intentar derrotar al COVID’19, no llevan consigo un PROCESO SUMARÍSIMO, con sanciones “ejecutivas MUY DURAS” y con el mero trámite de la identificación, HEMOS PERDIDO LA GUERRA.

Un país incapaz de parar los botellones, incapaz de exigir la mascarilla, incapaz de hacer respetar las distancias, incapaz, en definitiva, de hacerse respetar… HA PERDIDO LA GUERRA.

Si cada incumplimiento hubiera traído consigo sanciones dinerarias “fuertes”, calabozo incluido hasta que no fueran pagadas y con la alimentación a cargo de las familias correspondientes… ¿QUÉ HABRÍA PASADO?, ¿DÓNDE ESTARÍA AHORA EL COVID’19?

Para conseguir todo eso hace falta INTELIGENCIA, MANDOS y FIRMEZA, pero, sobre todo, TENER UN GRAN RESPETO POR EL PROPIO PAÍS.

Aquí, ahora, en España, nos han faltado las cuatro cosas, el CONOCIMIENTO, los DIRIGENTES, la FIRMEZA EJECUTIVA y, sobre todo, RESPETO y AMOR A NUESTRA PATRIA.

La historia la escriben los hechos, las conciencias la suscriben y las abstenciones la emborronan.

Quizás, y sin quizás, VOX ha cometido y comete errores, ciertas formas de manifestar sus ideas puede que sean fuertes, fuera de tono e incluso, para algunos, molestas.

VOX no se equivoca cuando expone, como cualquier otro, las ideas, los conceptos y los hechos objetivos…, tampoco se equivoca cuando condena los errores, los abusos y las traiciones.

VOX es un espejo donde a muchos les da vergüenza mirarse, porque en el mismo verán la VERDAD, simplemente…, la REALIDAD, la HISTORIA OBJETIVA y la MEMORIA DE TODOS.

Los Partidos de CENTRO, que no significa CENTRADOS, se equivocan cuando, ante hechos y realidades palpables, buscan el recodo para que no se les vea. Esa postura es voltear sus principios sin asegurar el resultado.

El CENTRO debería ser, en principio, balanza para un equilibrio social; hoy, 2020, simplemente, es un partido con muchas “formas” y poco contenido… acorde, únicamente, con sus chaquetas, sus corbatas, sus coches…, es decir, con las FORMAS UTILITARIAS.

Ante el dilema de una NECESARIA MOCIÓN DE CENSURA, altavoz para todos los españoles, se refugia en la ESTRATEGIA MAQUIAVÉLICA DEL PODER.

Las “FUGAS”, siempre se producen por motivos muy claros, aunque a veces cueste verlos:

• Materiales de poca calidad… (¿)
• Conducciones demasiado viejas… (¿)
• Malas interconexiones… (¿)
• Presiones excesivas… (¿)

No creo que sea difícil la interpretación…

Las abstenciones, son fugas y en muchos casos, como éste, Partido Popular, son FUGAS POR MIEDO.

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Hay “PROFESIONES” y “PROFESIONALES”.

Las primeras suelen encuadrar y perfilar conocimientos según programas, según políticos o según gobiernos.

Los segundos pueden ser “personas libres” o “personas, profesionalmente pagadas” o “personas, temporeros a sueldo”.

Las sociedades han evolucionado gracias a las ideas y éstas han sido transmitidas por esas personas “profesionales”.

La “información” llegará a su destino en tiempo y forma, según el tipo de profesional que la realice.

Así es la realidad social… sencillamente un diagrama o representación gráfica de las variaciones de un suceso o de las relaciones que tienen las ideas de un conjunto.

La “NOTICIA” … Su “trascendencia” … “Su “temporalidad” … Su “universalidad” … todo dependerá si la veracidad, cualidad de lo que es verdadero y está conforme con la verdad, predomina en ese diagrama informativo.

El principio de supervivencia hace que algunos “profesionales” deambulen entre el sometimiento empresarial y las vendimias temporeras.

El principio de fidelidad al compromiso con la veracidad se está convirtiendo en un medallero olímpico, ¡qué difícil!

Esperemos que la noria de la vuelta completa y nos traiga agua fresca y si no fuera posible que se aprenda a repartir suspensos antes que a dar títulos de prensa.