Hoy, 8 de Marzo, Día Mundial de la Mujer, o de la Mujer Trabajadora. Un día que defiende esa igualdad perseguida durante años y aún por alcanzar en muchos lugares y culturas, de derechos Y obligaciones de la Mujer, así como un trabajo digno y asalariado de forma igual a la de un hombre.

Sin embargo, ¡cuántos países no han llegado a adoptar, algunos ni a imaginar ni pensar, estas medidas de igualdad social en cuanto a género. Marruecos, por ejemplo, posee una Ley que no contempla los Derechos de las Mujeres.

¡Cuánta Discriminación en el mundo existe aún por el absurdo y simple hecho de ser mujer! Es sin duda, una total injusticia. No somos grandes mandatarios. Ni los nuestros pueden hacer mucho por eso. Pero nosotros somos el Pueblo. Los Ciudadanos de este pequeño lugar llamado Mundo, de este Planeta, de esta gran Sociedad, la nuestra. Así,  podemos hacer manifiesto público de lo que pensamos y defendemos como Justo, e incitar a más gente a hacerlo escribiendo o hablando de ello, como hago en este artículo yo.

Somos humanos, los seres «dominantes» por naturaleza y evolución, porque esta nos ha dado el don más maravilloso y creativo, del que nace todo: la Inteligencia y la Racionalidad.  Es por eso por lo cual deberíamos pensar todos en lo que es realmente Justo y lo que no, juzgarlo, valorarlo, ser críticos,  y hacer algo por defender aquello que pensamos: la Justicia Social y la Igualdad de Género. ¿O acaso nuestra raza ha evolucionado mal en cuanto a la Discriminación? Los seres Primitivos no eran machistas, ni feministas, por supuesto. Se repartían tareas según sus capacidades, y cada uno cumplía sus labores de convivencia y que han hecho posible la evolución y mantenimiento en este mundo de la vida humana. Hasta hace años, el hombre trabajaba fuera de casa, y la mujer dentro, ya que no tenía esta derecho a lo del hombre. Hoy,  en nuestra Sociedad «Moderna y Justa», en nuestro mismo país, aún persiste el machismo. Ahora ambos géneros o sexos tienen derecho al trabajo, pero hay muchos casos de parejas en los que llegan de trabajar hombre y mujer, y a la segunda le toca continuar su «jornada no remunerada» en su hogar. Bien es verdad que hay casos en los que le toca la tarea doméstica al hombre, y casos en los que se reparten el trabajo por igual, como por igual trabajan ambos fuera de casa. Este es el modelo ejemplar que se debe seguir.

Quiero hablar también del deporte femenino,  mucho menos conocido, menos acompañado por la sociedad y los medios de la comunicación y, por tanto, mucho peor remunerado. Sin embargo, está también en nuestras manos la importancia que se le de al deporte femenino. Persiste una sociedad aacostumbrada al deporte masculino. Y otro aún no se acoge de igual forma o gusta menos, o incluso resulta extraño. Pero debemos pensarlo igual. La sociedad en general tiene el poder que siempre destaco para cambiar las cosas. Pero en este caso, los medios de comunicación son los que más tienen en su mano.

La igualdad en general no existe. No puede trabajar lo mismo un hombre que una mujer embarazada. No puedes exigir lo mismo a uno que a otro, por razones fisiológicas, naturales, de esfuerzo, de diferenciación, ya que no somos iguales hombres y mujeres. Igualdad no existe. Y puede pedir. Ni siquiera existe igualdad entre las personas de un mismo sexo. Hay miles de difencias entre unos y otros.

Pero sí existe o debería existir la Igualdad en Derechos, en Obligaciones. En Dignidad, ya que todos la poseemos por el hecho de ser personas, de haber nacido. Y debemos evitar manifestando lo que pensamos que se arrebate esa Libertad, esos Derechos, esa Dignidad.

Tanto hombre como mujer han de ser iguales en Derechos, Obligaciones, Dignidad, Voz y Voto. ¿No pensáis lo mismo?…

Juanjo García Amorós

Twitter: @JGarciaAmoros