26 de abril. En el silencio de la Abadía cisterciense de Dueñas, se recordaba al “Hermano Rafael”, San Rafael Arnaiz.

Silencios de hombres maduros, en busca de la inmensidad de Dios… Silencios, llenos de renuncias, de sacrificio diario, de humildad escondida, de caridad amable, de comprensión, de soledad llena de humanidad… Silencios, hechos con la palabra interior que sólo su Dios puede escribir… Silencios, que mirando al cielo, no siempre sonríen porque el dolor es humano aunque su fe sea divina…

27 de abril. Rodeados de amigos del “Hermano Rafael”, sus hermanos trapenses celebraron su fiesta. Yo estaba allí, con los míos, con los suyos… todo un privilegio.

Contemplando su imagen, rodeada de flores, a los pies del altar, le sonreí… cerré los ojos, soñando… y comencé a tartamudear:

“¡Hola, hermano Rafael!, hace mucho que deseaba venir a tu casa. Siempre la he recordado en familia y siempre te hablé desde la distancia. Hoy, hace un momento, te he sonreído porque te recordaba como hace muchos años, cuando, todavía niño, nos presentaron.

¡Hermano Rafael!, es difícil vivir… Es difícil ver a Dios en este mundo de hoy… Es difícil buscar y encontrar ese Dios, inmenso SER lleno de amor… Es difícil caminar cogido de su mano… ¡Qué difícil, Hermano Rafael!…

¡Hermano Rafael!, yo tengo la suerte de sentir tu sencillez porque tengo la suerte de tratar con tus sobrinos, Carlos, Fernando, Mercedes, Gonzalo… se parecen a ti…

¡Hermano Rafael!, ¿qué tal Rosa Elena, tu sobrina?… ¿qué tal tu hermano Leopoldo?… Yo les quería mucho… quizás era porque me recordaban tu vida… Sueño, muchas veces, que Rosa Elena te quita la capucha de trapense para ver mejor tu cara y, después, sonríe, ríe… llena de felicidad.

¡Hermano Rafael!, dile a Leopoldo, tu hermano, padre de mis antiguos alumnos, que no me he olvidado de llevar siempre una goma en el bolsillo “para borrar de mi cabeza todo aquello que haga daño”, porque, como él decía, lo peor es el rencor, la envidia, la desilusión y la falta de esperanza… Dile también que, como este mundo es tan difícil, ya he tenido que comprar varias gomas… Dale un abrazo muy fuerte de parte de “Angelito”.

Bueno, ¡Hermano Rafael!, que me despisto. A mi lado está Amparo… ya la conoces… es, como tú, un libro abierto de espontaneidad… ¡Cuídala mucho!…

Para mí, sólo pido perdón… Tu querido Dios sabe porque lo digo… No te olvides de mí y de los míos, tú sabes lo que necesitamos.

Un fuerte abrazo, Rafael, que el padre Abad va a comenzar la misa, adiós”

Ya todos los cordobeses padecimos la entrega de la entonces “comunista” y alcaldesa de Córdoba Rosa Aguilar con la Iglesia Católica, y muy especialmente con el Cura-banquero Castillejo.

Después vino la espantada con nocturnidad y alevosía de la rebautizada en el Rocío como Rosa de las Marismas tanto de IU como de Córdoba; pasando a ser Consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, con el PSOE.

Y desde este cargo, le concedió permiso a la Iglesia cordobesa para abrir una puerta en la Mezquita, donde había una celosía protegida.

Permiso que ahora la tumban los Tribunales, alegando que contraviene las propias normas de la Junta.

¿Eso no es prevaricación, aparte de integrismo?

Y es que eso de ser al mismo tiempo comunista, socialista, católica y monárquica; es una cruz muy pesada.

Rafael Bueno.

Córdoba.

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Pues nada, ya el “pueblo sabio” votó entre lo que previamente habían elegido los partidos políticos, y he aquí el resultado: más de lo mismo y de los mismos.

Más gasto público, más privilegios para la casta política, y muchísima más ruina para el pueblo.

Eso sí, mi felicitación a la Iglesia Católica por el magnífico resultado obtenido por su nacionalcatólico psoe ni socialista ni obrero.

Y como la economía de la que nadie habla está por encima de creencias e ideologías, prepárense todos a entrar en recesión más pronto que tarde, y a un inevitable rescate de España, por el Eurogrupo.

¡San Francisco Franco, ruega por nosotros!

Rafael Bueno.

Córdoba.

Callar, pensando que la realidad que uno niega denunciar se difuminará, es el gran error de todo político apoltronado… adaptado al vaivén de la poltrona.

Es triste callar ante la mentira o difamación, cuando ese silencio viene motivado por la impotencia de conseguir, entre los afiliados, los costes de las necesarias demandas o querellas… es triste. Todos aquellos silencios, políticos y sociales, expertos en nadar y guardar la ropa, se convierten, con el tiempo, en IRRESPONSABLES… La política no hace veraz la “Ley del Péndulo”… la política fagocita la verdad si con ello se consigue la estabilidad personal… Agotado el 28 de abril quedan los silencios irresponsables… y con ellos las duras facturas de la realidad social interesada… Lo peor de la democracia es la capacidad mental que tiene el ser humano de borrar el “objetivo de la cámara” y olvidarse de todo aquello que antes condenaba… Después de los “muchos 28” siempre toca pensar cómo seguir en el carro, aunque sea de costado… Esa es la gran IRRESPONSABILIDAD… SEGUIR PROTEGIDOS POR EL SISTEMA A COSTA DE LLENAR LAS MOCHILAS DE SILENCIOS.

Es triste callar ante la mentira o difamación, cuando ese silencio viene motivado por la impotencia de conseguir, entre los afiliados, los costes de las necesarias demandas o querellas… es triste.

Todos aquellos silencios, políticos y sociales, expertos en nadar y guardar la ropa, se convierten, con el tiempo, en IRRESPONSABLES…

La política no hace veraz la “Ley del Péndulo”… la política fagocita la verdad si con ello se consigue la estabilidad personal…

Agotado el 28 de abril quedan los silencios irresponsables… y con ellos las duras facturas de la realidad social interesada…

Lo peor de la democracia es la capacidad mental que tiene el ser humano de borrar el “objetivo de la cámara” y olvidarse de todo aquello que antes condenaba…

Después de los “muchos 28” siempre toca pensar cómo seguir en el carro, aunque sea de costado…

Esa es la gran IRRESPONSABILIDAD… SEGUIR PROTEGIDOS POR EL SISTEMA A COSTA DE LLENAR LAS MOCHILAS DE SILENCIOS.

Detrás de casi todos los nacionalismos, está la Iglesia Católica.

Eso está más que demostrado.

Lo padecimos en el País Vasco, que nos dejó cerca de 1.000 víctimas inocentes.

Lo hemos visto en el golpe independentista Catalán, donde votaron en algunas Iglesias que aún mantienen en sus campanarios las banderas independentistas.

Y ahora en el juicio por el “procés” han testificado que el golpista Oriol Junqueras, en el momento decisivo del golpe, se encontraba comiendo con el Obispo.

¡Blanco y en botella!

Pero no tiene la culpa la Iglesia, sino el poder civil que permanece más humillado ante ella, que Franco.

Y a Franco, ya vimos cómo le “pagó” la Iglesia.

Rafael Bueno.

Córdoba.

Esta frase es una de las grandes mentiras usadas por el poder, para llevar a los ciudadanos como corderitos a votar, entre lo que previamente han elegido en listas cerradas y bloqueadas, los partidos políticos.

Gran mentira, porque aquí no hay Democracia ni Constitución, al no haber separación de poderes ni representación del pueblo.

Lo que hay es una partitocracia que como toda oligarquía de poder, es corrupta por naturaleza propia.

Y sabido esto, el que quiera que vaya a votar, porque cada uno es muy libre de hacer lo que quiera.

Eso sí, consciente de que cada pueblo tiene lo que se merece.

Rafael Bueno.

Córdoba.

Los llamados ancianos “societarios”, sentados en los umbrales de un infinito “muy personal” y nada político, tienen la gran ventaja de que su discurso no busca remuneración sino garantías de futuro para todos aquellos, que tras ellos y sin pedirlo, tendrán que labrar la tierra que ellos dejan.

El organigrama político, sin embargo, reorganiza su vida en un sin fin de actividades de salón… de viajes con bufet… de charlas sin preguntas… en definitiva, de “soledades organizadas para que no molesten”. Esa es la REALIDAD.

La VEJEZ, sin embargo, debe de HABLAR… Relatos con huellas de experiencia… Relatos con huellas de comprensión… Relatos objetivos porque a esa edad lo subjetivo irá siempre al crematorio.

La VEJEZ, lleva escrita la historia en cada arruga de su cuerpo… La VEJEZ no necesita MEMORIA HISTÓRICA… ¿por qué?… Porque todos ellos, todos, saben que lo importante es un futuro de convivencia constructiva… de progreso colectivo… de soñar en crear ilusiones… porque la LEY del PÉNDULO siempre amenazará con repetir lo que ellos ni siquiera quieren recordar.

Por todo ello, la VEJEZ debe de HABLAR y recordar sus experiencias… una vejez silenciosa nunca dejará herencias de futuro…

Nuevo “pelillos a la mar” en el saqueo de las cajas de ahorros que nos costó a todos más de 100.000 millones.

Ahora le ha tocado el “no hay indicios de delito” a Banca Cívica (CAN, Cajasol, Caja Burgos y Caja Canarias) que necesitaron casi 5.000 millones de rescate.

Y por ahí anda funcionando la Fundación Cajasol.

Y estos al menos llegaron a los Tribunales, pero la Cajasur de la “Santa” Iglesia Católica, con un agujero de 3.000 millones; ni eso.

Eso sí, todos los que robaron una gallina, están en la cárcel.

¿No “dicen” que todos somos iguales ante la Ley?

JA JA JA.

Rafael Bueno.

Córdoba.

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Un grupo de niños curioseaban alrededor de unos legionarios que vienen a participar en la Semana Santa Cordobesa.

Una niña señaló con su dedo el fusil de uno de ellos y le preguntó inocentemente: ¿Y esto para qué es?

El legionario contestó como un rayo y con una sonrisa: Esto es para defenderte a ti.

La niña se alejó feliz, y yo le dije al legionario: Olé, así se habla, sí señor.

Me saludó militarmente y se fue.

Qué alegría ver esos cambios en positivo.

A ver si a la casta política y a otros poderes del Estado, se les pega algo de este legionario.

Rafael Bueno

Córdoba

La detención del integrista musulmán que pretendía inmolarse en la Semana Santa de Sevilla, es una muestra del buen hacer de nuestras fuerzas de seguridad.

¡ENHORABUENA A TODOS!

Porque la única vacuna contra el terrorismo, es la prevención.

Y para ello hay que utilizar la inteligencia policial, a la que se le deben dedicar todos los recursos necesarios.

Tenemos muy buenos profesionales y a la vista está.

Lo que hace falta es que la casta política no los utilice para sus oscuros fines particulares, y los dejen trabajar como ellos saben hacer y a lo que han dedicado sus vidas: al servicio público.

Rafael Bueno.

Córdoba.